La Fase 3 es inevitable; es imposible detener súbitamente la epidemia, advirtió de nueva cuenta el subsecretario de salud, Hugo López-Gatell, al señalar que lo que si se puede hacer es más lenta la transmisión.
En conferencia matutina en Palacio Nacional, el funcionario federal, reiteró que conforme pasen las semanas de propagación, COVID-19 será la enfermedad predominante en el país, por lo que pidió una vez más a los mexicanos hacer caso a las medidas de prevención y se queden en casa.
“En cualquiera de los casos la fase 3 es inevitable, la epidemia no se va a parar, lo hemos dicho muy claramente, no se va a parar, es imposible detener súbitamente una epidemia con un virus trasmisible, como es el virus SARS CoV-2; lo que sí se puede hacer es más lenta la transmisión. Y el propósito fundamental es que cuando entremos en la fase 3, que está muy próxima, entonces tengamos una menor cantidad de casos diarios, sobre todo de las personas que requieren tratamiento hospitalizado y entonces podamos darles atención a todos y todas”, advirtió.
En otro momento, López-Gatell, indicó que “los niños no son una población de alto riesgo” por casos de coronavirus, a diferencia de los adultos mayores, mujeres embarazadas y los que padecen alguna enfermedad crónica.
“Recordarán que al inicio de la epidemia habíamos comentado que los niños los íbamos a considerar, sobre todo los menores de cinco años, como un grupo de riesgo igual que los consideramos para la influenza. Esto lo dijimos en un momento en donde la epidemia sólo estaba en China y no había una suficiente experiencia acumulada de conocimiento para identificar esto. Afortunadamente el conocimiento que se produjo conforme la epidemia avanzó en otros países nos ha permitido identificar con razonable certidumbre que los niños no son una población de alto riesgo, a diferencia de lo que sí seguimos considerando para los adultos mayores, las mujeres embarazadas y las personas que padecen enfermedades crónicas”, señaló.
De igual forma, dijo que eventualmente, entre el 67 y 70 por ciento de la población en el mundo tendrá la infección; la gran mayoría no desarrollará la enfermedad.
“En México y en cualquier país del mundo se anticipa que hasta el 67 o 70 por ciento de las personas eventualmente vamos a tener infección, esperamos que la enorme mayoría sin tener enfermedad alguna. Esto es lo que ocurrirá y contribuirá finalmente a que la epidemia se detenga. No habiendo una vacuna, no habiendo un tratamiento específico, esta será la contribución más importante a que se detenga la epidemia en cualquier parte del mundo”.
Ejemplificó también que, un país es como una nave en el mar, que, si alguien piensa sabotearlo y no tienen consciencia, entonces podría perecer junto con los demás, esto al referirse a las noticias falsas relacionadas con el coronavirus, y sobre
los dichos del Gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, quien afirmó que médicos “están cayendo como moscas” por Covid-19.
“Es deseable que en una sociedad plural todo mundo se pueda expresar, que todo mundo encuentre la libertad para externar sus opiniones, no siempre hay que coincidir. Y es una responsabilidad individual de cada quien situarse en el lado de la verdad o en el lado de la mentira y en la intención de comunicar algo, la responsabilidad que esto implica, con mayor razón cuando existe un reto para todas y todos en una nación hay que mantener un espíritu de unidad, de cordialidad y contribuir. Un país finalmente es como una nave circulando por el océano. Si uno piensa que uno puede sabotear a esa nave y no tiene consciencia de que entonces va a perecer junto con quizá los demás, está haciendo un daño a todos y todas”, opinó.
López-Gatell, ventiló que existen dos prototipos prometedores de ventiladores mecánicos para producirse en México en el programa que coordina el Conacyt para atender la emergencia.
“Todavía no tenemos el informe más reciente del ciclo reciente en la última semana, parecía que había dos prototipos prometedores y una oferta importante de varias compañías, la industria automotriz y otras, aeronáutica también, son otros de los que tienen estándares industriales muy favorables”, ventiló.
Finalmente, expuso que el suministro de los insumos médicos que vienen de China tardan entre 3 y 4 días en llegar a su destino, por lo que insistió en su llamado al personal de salud que le ayuden a denunciar a quién está obstaculizando de manera local la entrega del equipo que el Gobierno Federal envía a los hospitales para hacer frente la pandemia.