Se avanza a pasos rápidos después del caso Culiacán. El partido en el poder tiene lista la despenalización de la marihuana para uso lúdico en la cámara alta este mes. Los senadores mexicanos ya tienen una fecha clave para el futuro de esta planta en México: el 31 de octubre. Con su mayoría legislativa, Morena apunta a una legalización rápida.
Detrás de esta iniciativa está Mario Delgado. El morenista no solamente propone la legalización médica y lúdica de la planta, también ha creado todo un plan para que sea el gobierno mexicano el que se encargue de cosechar y vender marihuana en todo el país y el extranjero. La estrategia de Morena es crear la Cannsalud, una empresa paraestatal para controlar todo lo relacionado con la planta.
Este martes 29 de octubre se empezará a discutir el tema en la cámara de senadores y será el día 31 de octubre cuando se pretende avalar la iniciativa. Con esto, el primer gobierno de izquierda en México está listo para despenalizar una planta que ha generado poder económico y territorial al narcotráfico. Esto sucede a poco menos de dos semanas del caos que generó el cártel de Sinaloa para liberar a su líder.
La visión de Olga Sánchez
El gobierno de Morena se ha mostrado completamente abierto al tema, pero el presidente López Obrador se ha negado a hablar públicamente de la planta. Aún así, su partido (sobretodo la secretaria Olga Sánchez Cordero) ha acelerado el proceso para legalizar una planta que ha generado fortunas para el crimen organizado. Detrás de la legalización está, claramente, el tema de la recaudación de impuestos.
Con esta legalización en trámite México accedería a un mercado de 1,700 millones de dólares anuales. En Estados Unidos, Canadá y varios países europeos, la planta no solamente ha generado avances en tratamientos médicos a base de cannabis o proyectos para cultivos masivos de la planta, también han ingresado miles de millones a las arcas del gobierno. México quiere formar parte de las ganancias de esta industria verde.
