Las compañías que fabrican productos cosméticos y para la piel están luchando de forma activa contra la falsificación.
ESTADOS UNIDOS.- Comprar los productos de belleza más novedosos puede resultar costoso. ¿Es posible ahorrar dinero y de cualquier forma presumir de cara?
Quizá tenga suerte y encuentre cosas en liquidación en detallistas respetables. Pero tenga cuidado cuando los precios parecen demasiado buenos para ser ciertos en internet, o de vendedores que quizá mañana ya hayan desaparecido, como un vendedor de un mercado de pulgas.
Si compra esos productos, quizá al final tenga más problemas de lo que pensaba.
Eso le sucedió a principios de año a una mujer de California de 47 años. Estuvo semicomatosa durante semanas tras usar una crema para la piel con la marca de Pond’s que compró en México. Resulta que el producto había sido adulterado con mercurio. Los niveles de mercurio en su sangre eran 500 veces más altos de lo normal, según los informes publicados.
Pond’s anotó en una declaración que no usa mercurio en sus productos. La compañía está trabajando con las autoridades para investigar esta alteración del producto.
«Las ventas ilegítimas, la alteración de los productos y la reventa son problemas de la industria de la belleza que ameritan una atención cercana y la concienciación de los consumidores», señalaba la declaración.
Por suerte, la mayoría de los incidentes de falsificación o alteración de productos no son tan graves. Pero si no compra en detallistas respetables, saber qué contienen exactamente los productos que se está poniendo en la cara resulta difícil.
El año pasado, las autoridades de Los Ángeles confiscaron 700,000 dólares de cosméticos falsos en una zona comercial al aire libre bien conocida. Los productos falsos incluían nombres de importantes marcas, como Urban Decay, NARS, MAC y Kylie Cosmetics.
Los clientes sin duda no obtuvieron los productos de lujo que esperaban. De hecho, unas pruebas de laboratorio arrojaron algunos resultados sorprendentes. El maquillaje estaba contaminado con unos niveles altos de bacterias y heces, según ABC News en Los Ángeles.
Cuando le preguntaron cómo habían llegado heces al maquillaje, el detective Rick Ishitani, del Departamento de Policía de L.A., explicó que los productos falsificados no se fabrican bajo las mismas condiciones seguras e higiénicas que los reales.
«Básicamente, esas heces se mezclan de alguna forma con el producto que están fabricando en el garaje o el baño, donde quiera que fabriquen esas cosas», declaró a ABC News.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU. instó a los consumidores a tener cuidado.
«Los productos falsos, incluyendo a los cosméticos, son ilegales y podrían ser dañinos para la salud de un consumidor», comentó un vocero de la FDA.
Según la FDA, el peligro es que los productos falsos contengan ingredientes nocivos o prohibidos, productos secundarios inaceptables de la fabricación o aditivos colorantes no comprobados.
Las compañías que fabrican productos cosméticos y para la piel están luchando de forma activa contra la falsificación.
«La falsificación de cosméticos ha sido el flagelo de la industria, y está empeorando», apuntó el Dr. Scott Wasserman, fundador y director ejecutivo de Cosmetic Alchemy, fabricante de LiLash y LiBrow, productos que se usan en las pestañas y las cejas.
Wasserman dijo que el Departamento de Seguridad Nacional se puso en contacto con su compañía, que tiene su sede en Scottsdale, Arizona, tres veces en un mes para identificar productos falsificados sospechosos que se encontraron en contenedores de transporte. Y no solo los productos a granel que llegan al país son un problema. Internet es otra fuente de falsificaciones. Cuando Cosmetic Alchemy presentó la marca de un producto al sitio web Alibaba, el sitio tuvo que eliminar 465 ofertas de productos falsificados.
¿Cómo pueden protegerse los consumidores?
La Dra. Shari Lipner, dermatóloga de NewYork-Presbyterian y Weill Cornell Medicine en la ciudad de Nueva York, dijo que para el consumidor promedio es casi imposible diferenciar un producto de marca de una falsificación bien hecha.
Lipner comentó que no hay que gastar una fortuna para mantener una piel sana, pero añadió que «mi mejor consejo es comprar productos cosméticos y de cuidado de la piel en lugares reputados».
La FDA advirtió que los consumidores deben tener cuidado con los productos en liquidación en los mercados de pulgas o que se revenden en línea, en canales como las subastas. Recomendó revisar el envase cuidadosamente, buscando cualquier evidencia de que el producto se pudiera haber reempacado o reetiquetado. Además, asegúrese de que el aspecto y el olor del producto sean los adecuados.
Pero, ¿qué pasa si no pudo resistirse a comprar un pintalabios por 10 dólares, que usualmente cuesta 50 dólares en el mercado de pulgas, y ahora le pican los labios? Lipner señaló que el primer paso es dejar de usar cualquier producto que irrite su piel.
«La mayoría de los sarpullidos en la piel duran poco, y mejoran siempre y cuando no exponga a su piel al producto culpable», aseguró.
Si el sarpullido sigue empeorando, o desarrolla dolor o ampollas, consulte al médico, preferiblemente a un dermatólogo, añadió Lipner.
CON INFORMACIÓN DE DEBATE